jueves, 9 de febrero de 2012

Me cuesta aceptar que no existe alguien que sea un todo. Un todo lo que a uno le hace falta.
Un '' todo lo que quiero''.
Otra luna para otro sol.
No existe, pero sí lo soñamos.
Por lo menos yo, si te sueño.
Y te veo inmenso. Te veo imperfecto.
Te imagino sin sexo. Te imagino musical.
Y te escucho, te oís tan placentero.
También te siento, a veces. Muy pocas veces. Y sólo puedo sonreír.
Donde estas? Porque no existís? Cuando vuelvo al mundo real me entristece. No solo el hecho de que no exista un ''todo'' para mi. Sino también saber que nunca voy a ser el ''todo'' de nadie.
Nunca es suficiente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario